martes, 12 de octubre de 2010

Bofetada educadísima de Brasil al mundo.


Cristóvão Chico Buarque.

En un debate en una universidad de EEUU preguntaron a Cristóvão Chico Buarque qué pensaba sobre la internacionalización de la Amazonia. El ex gobernador del Distrito Federal y actual Ministro de Educación de Brasil comentó que esperaba dar la respuesta de un humanista y no de un brasileño. Ésta fue su respuesta exacta:

”Como brasileño, sólo hablaría en contra de la internacionalización de la Amazonia. Por más que nuestros gobiernos no cuiden debidamente ese patrimonio, es nuestro. Pero, como humanista, sintiendo el riesgo de la degradación ambiental que sufre, puedo imaginar su internacionalización, como también de todo lo demás, que es de suma importancia para la humanidad. Si la Amazonia, desde una ética humanista, debe ser internacionalizada, internacionalicemos también las reservas de petróleo del mundo entero. El petróleo es tan importante para el bienestar de la humanidad como la Amazonia para nuestro futuro. A pesar de eso, los dueños de las reservas creen tener el derecho de aumentar o disminuir la extracción de petróleo y subir o no su precio.

De la misma forma, Buarque piensa que la Amazonia no debería ser quemada por la voluntad de un dueño o de un país. Y que quemarla es tan grave como el desempleo provocado por las decisiones arbitrarias de los especuladores globales. “No podemos permitir que las reservas financieras sirvan para quemar países enteros en la voluptuosidad de la especulación... No se puede dejar que ese patrimonio cultural, como es el patrimonio natural amazónico, sea manipulado y destruido por el sólo placer de un propietario o de un país… Igualmente, Nueva York, como sede de las Naciones Unidas, debe ser internacionalizada. Por lo menos Manhatan debería pertenecer a toda la humanidad. De la misma forma que París, Venecia, Roma, Londres, Río de Janeiro, Brasilia... cada ciudad, con su belleza específica, su historia del mundo, debería pertenecer al mundo entero.

Y Biarque concluye: “Si EEUU quiere internacionalizar la Amazonia para no correr el riesgo de dejarla en manos de los brasileños, internacionalicemos todos los arsenales nucleares. Basta pensar que ellos ya demostraron que son capaces de usar esas armas, provocando una destrucción miles de veces mayor que las lamentables quemas realizadas en los bosques de Brasil. En sus discursos, los actuales candidatos a la presidencia de los EEUU han defendido la idea de internacionalizar las reservas forestales del mundo a cambio de la deuda. Comencemos usando esa deuda para garantizar que cada niño del mundo tenga la posibilidad de comer y de ir a la escuela. Internacionalicemos a los niños, tratándolos a todos ellos sin importar el país donde nacieron, como patrimonio que merecen los cuidados del mundo entero. Mucho más de lo que se merece la Amazonia. Cuando los dirigentes traten a los niños pobres del mundo como Patrimonio de la Humanidad, no permitirán que trabajen cuando deberían estudiar; que mueran cuando deberían vivir. Como humanista, acepto defender la internacionalización del mundo; pero, mientras el mundo me trate como brasileño, lucharé para que la Amazonia, sea nuestra. ¡Solamente nuestra!

NOTA: Este artículo fue publicado en el New York Times, en el Washington Post, en Usa Today y en los diarios de mayor tirada de Euroa y Japón. Pero, en BRASIL y en el resto de Latinoamérica, no fue publicado.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Que buen planteamiento y manera de exponer el criterio personal acerca de la internacionalización de la Amazonia. Al mismo tiempo se encarna en el mio y me conecta a emitir un juicio sobre ello. Me parece absurdo las ambiciones y pretenciones de EEUU y sus aliados en lo concerniente a los recursos naturales globales. Aunque sea una sola voz en este comentario, espero que haga parte de las muchas quienes tambien se oponen a esta "nueva ridiculez Gringa"

No soy tan diplomatico como
Cristóvão Chico Buarque, sin embargo podria realizar una comparación analógica al caso: Sería como pedirle a una persona o familia a que renuncie a su patrimonio y/o que el patio de su casa sea propiedad de quienes manejan el poder, para hacer con ello lo que se les diera la gana.

Atentamente:

Jose Luis E.M